El domingo 29 me sentí rara. Estaba chata, me dolía todo y me quejé un buen rato hasta que con sus pataditas Diego logró relajarme. A las 21 hrs empezaron las contracciones, que cada vez se hicieron más frecuentes. Jorgito llegó a las 10 y se encargó de tomar el tiempo, aunque no estaba muy convencido. Nos acostamos a ver una película y todo, pero el dolor era cada vez mayor y a las 2 de la mañana partimos a la Clínica. Jorgito se duchó y puso ropa de trabajo, y mi mamá se fue en mi auto.
Ingresé con 4 cm de dilatación y cuello borrado (la mitad del trabajo de parto hecho), me pusieron un suero, la típica camisola abierta a los lados, y a poto pelao a caminar por los pasillos. Nos reímos mucho, dolía, pero fue entretenido.
A las 5 de la mañana me pusieron anestesia. Epidural con dificultad. Mientras la ponía me salía calostro como Tony caluga. Luego la matrona rompió la bolsa y salieron litros y litros y litros.... polihidroamnios con cuática. Es como hacerse pipí, rico.
Se turnaban entre mi mamá y Jorge para acompañarme, viendo plasma en la pieza de preparto y parto. Había un sillón grande, baño, y todo para el parto.
Como a las 7 ya estaba en 9 de dilatación pero la cabeza de Dieguito no bajaba, asi que aguanté un par de horas sin efecto de anestesia. Cuando me pusieron el refuerzo me bajó la presión a 60/40 mmHg y Jorgito me acompañaba de la mano (después me dijo que se asustó).
Así pasé toda la noche como Buda. Sentía hormiguitas en las piernas... "como extraterrestre".
El Doctor llegó a las 11 y dijo que aguante porque si pasaba Dieguito y teníamos que esperar que bajara. Ahi yo tenía fatiga y lo único que quería era un té con mucha azúcar. Me dieron un yogurt y después un té, pero con poca azúcar... que terrible era la necesidad de ese té.
A la una estaba todo listo, lamatrona me hizo pujar para practicar y bajó la cabeza. Jorge vio el pelo de Dieguito. Le brillaban los ojos.
El parto fue rápido. Tenía que respirar profundo, tomar aire y guardarlo y pujar todo lo que pudiera con el aire adentro, mientras duraba la contracción. Jorgito me afirmaba por la espalda, la matrona empujaba hacia abajo mi guata con su antebrazo y al final... apareció la mano del doctor y empujó lo que faltaba. Dieguito no lloró altiro y me lo pasaron a penas nació. Mojadito con unto y sangre, calientito... cosa, lloró suavecito un par de veces y me cagó el brazo derecho entero. Después lo limpiaron, vistieron y se fue con Jorgito. A mi me llevaron al tiro a la pieza y 2 horas más tarde me trajeron a Dieguito. Hizo una hipoglicemia, normal en guaguas grandes, que se le pasó con un suerito y dandole de mamar. Se tomó hasta la molestia...
Como a las 11 y media se lo llevaron a la sala cuna y dormimos por primera vez separados.
Te amo Diego Alonso.
