@larraincl

27 de enero de 2007

Un día de enero

Era un día de sol.
-A levantarse hijo – dijo la madre – despídete de tu padre.
-Hoy vienen visitas? – preguntó con sueño el pequeño despeinado
-Sí, hijo. Péinate y ponte bonito –

Pasó el día en calma. Los más chicos jugaban en el pasto, mientras los papás salieron a pescar. Las gaviotas revoltosas eran lo único que sonaba.
-Mira mamá! Ahí vienen! – gritó entusiasmado el hijo
-Si!!! Vamos a recibirlos!!! –
-Qué parecen todos amontonados! Jaja –
-Póngase para la foto mi bebé – dijo la madre abrazando a su pingüinito.
(Esto ocurrió un día de enero. Isla Magdalena, XII región - Chile)